Sunday, November 04, 2012

La Casa de las Provincias Aguilera-Straub

DESDE EL ESPACIO ARGENTINA…
Entendemos a la Cordillera de los Andes como una columna vertebral representativa de nuestro país, incluso para las provincias que no la tocan directamente.
Ese terreno, por momentos escarpado, irregular, ventoso, pedregoso, con momentos de calma y zonas de llanura, nos muestra pedacitos de lo que compone nuestra geografía natural.
Blanco, marrón, rojo, piedra, tierra, hielo, agua, viento, calma, llanura, quebradas, desierto, bosques, fauna y flora, son algunas de sus características.
Hacia el Oeste, picos, altura, un límite territorial designado, y hacia el Este poco a poco se va aplacando, se pliega y se repliega, hasta generar una llanura de terrenos fértiles, desiertos, selva y playa hacia la costa Atlántica.
Todas las variables climáticas la modifican, o ella altera a todas las demás.
Así como geográficamente lo es, la entendemos como eje cultural. Enlaza los diversos pueblos originarios de N a S y de E a O, su música, sus olores, sus cultivos, su arte, su idioma y su forma de vida.
Interpretamos todos estos términos como presiones ejercidas desde y hacia la Cordillera.
Desde este punto, suponemos la esencia que da lugar al Espacio Argentina. Sin separar por provincias, son regiones, son todas estas subculturas las que componen el Ser Argentino y se recrean en este lugar.
¿Hasta dónde entendemos un límite por percibirlo realmente? Los límites son mucho mas difusos, progresivos, e incluso muchos de ellos impuestos a posteriori por el hombre.
Hablamos de regiones, de una identidad en común que define y nos hace sentirnos propios.
Nos situamos en la Ciudad de Buenos Aires, por lo cual también tenemos un entorno cercano al cual responder. Observamos una división marcada entre la vieja ciudad, la ciudad consolidada, y la nueva Buenos Aires que se muestra como portarretratos desde la entrada desde el Río. La esquina de Alem y Córdoba se muestra más maciza,a  modo de reflejo de esta “vieja parte de la ciudad”. Del mismo modo, tiene mayor altura. No sólo abre las visuales cuando llegamos desde la barranca, es la presentación del Espacio Argentina, sino que también permite que todo el proyecto reciba la luz del sol.





Consideramos de gran importancia el tejido de manzana que tiene nuestra ciudad colonial. Por lo cual decidimos, con volúmenes en altura, tomarnos a la L.M. para recrear y de alguna manera completar la manzana.  Del mismo modo, la secuencia de llenos y vacíos en el proyecto, reinterpreta la sucesión de espacios abiertos y espacios cerrados que contiene una manzana de nuestra Ciudad.  Los quiebres de la Cordillera, son generados por su geografía irregular a lo largo y lo ancho de la Rep. Argentina. En nuestro proyecto, lo traducimos en la forma en que el edificio “se desmaterializa” y por las líneas ortogonales que heredamos de la Ciudad, frente a las nuevas diagonales y manzanas construidas hacia el Río de la Plata.
Generamos un pasaje interno, no sólo como apertura Alem-Madero, sino como una operación que le devuelva el espacio público a la sociedad. Ese pulmón de manzana privado, pasará a ser para el uso de todos, recreando los paseos porteños que se perdieron y produciendo una plaza calma para ser usada en cualquier momento.



2 comments:

Anonymous said...

Muy bueno este proyecto!!

La tercera en discordia said...

Que Grandes las bicho!!!