Tuesday, December 06, 2011

Gleiss - Paris - Saracco

 Cinética urbana
  Gente en la ciudad, miles de almas circulando, de un lado a otro, de un lado a otro…
  ¿Qué sería de estas calles si nuestra estela no fuera tan efímera? Si hiciéramos materia de nuestro caminar, materia conceptual de pasos..?
  La ciudad sería un denso basamento de todos, idas y vueltas, breves transacciones y fugaces encuentros  que se desmaterializarían hacia el cielo, hacia donde subir es privilegio de pocos.
  Lo paradójico o contradictorio es que esta masa conceptual  es en realidad  vacío, espacio habitable que cala lo construido.


 A partir de éste juego dual de sustracción, de pensar el todo como lleno vaciado con la cinética urbana como gubia, comenzamos a mirar nuestra Buenos Aires con un filtro, a imaginar cómo se cala a partir del movimiento que generan sus nodos, de cómo se tensa la Avenida de Mayo del Congreso a la Casa Rosada, o la Diagonal Norte de Tribunales a la Plaza Cívica, y de ésta a la nueva Ciudad Judicial que tensará Diagonal Sur. Y  9 De Julio, cómo olvidarla, emblema tensado por la ciudad, de Norte a Sur.



 A la vez imaginamos cómo es la vida en los edificios que contienen y conforman las calles y avenidas, con gente que sube y baja, entra y sale o permanece parte de su vida en estanqueidad entre esos muros…
 Por otro lado, si olvidamos por un momento esta “estela conceptual del movimiento” y pensamos en lo construido, podemos observar desde una mirada realista que los edificios también se desmaterializan desde el basamento; pero si contamos el todo como lleno calado, el nivel peatonal  se disgrega desde sí hacia los túneles subterráneos  y hacia las cornisas de los viejos edificios, dejando una gran masa que reconstituye la cuadrícula de la vieja ciudad indiana con sus jirones de aspiraciones Haussmanianas.




Con el vacío como emblema y  silente voz de la libertad y de lo público, nos lanzamos al lírico abismo de hacer arquitectura cívica.


Monday, December 05, 2011

Cusmai-Gerbi


De nuestro reconocimiento y análisis sensible notamos, los violentos flujos de transito de vehículos y ciudadanos en esta zona neurálgica, la conformación y consolidación de Av. De Mayo y Diagonal Norte, en contraposición con la Diagonal sur, los diferentes estilos arquitectónicos conviviendo, la ortogonalidad preveniente del damero y sucesión de capas  atravesada por las diagonales, la masa construida, densa, sin un vacío aparente o espacio de aire a la vista, convirtiendo la diagonal sur en grandes túneles acantilados.     
El pasaje, las galerías, las escalas, los anchos, los retiros, la importancia del espacio público para la sociedad en democracia, la importancia de la esquina como punto de encuentro, la idiosincrasia del porteño, las formas de apropiación del espacio, los bares y cafés, las oficinas, los turistas.
Avenida de Mayo, las diagonales, la Plaza de Mayo y el obelisco, además de ser hitos urbanos son conectores institucionales y los vacíos que anteceden a estos son  escenarios de manifestaciones culturales, reclamos, festejos, recuerdos, tensiones, marchas, siempre concentrados en el mismo espacio físico.






El proyecto se centra en estos temas que analizamos, la reinterpretación del basamento, desarrollo y remate, manteniendo el filo terminante que marca la diagonal uniendo visualmente la plaza de Mayo con la 9 de Julio, pero retirando y escalonando los volúmenes de manera sutil para que las fachadas generen visuales menos tajantes, y así organizar y diferenciar los distintos espacios, usos e ingresos.
Incluimos esta mirada y la conectamos con la sucesión de capas intercaladas con la que fue construido buenos aires cultural y arquitectónicamente.
Un gran atrio a escala urbana sobre la fachada a la 9 de julio, un ingreso a la justicia para todos, que recibe toda la fuerza, la tensión y el vacío que llegan desde la  avenida y se van tamizando hasta llegar a la plaza de Mayo.    

Entendiendo e interpretando la apropiación del espacio público cediendo parte del terreno para realizar una plaza cívica como inicio del trayecto por la nueva Diagonal Sur.





El edificio toma altura a donde la naturaleza urbana lo deja, sobre la gran avenida y una morfología en punta representando la tensión latente sobre la que se desarrolla la ciudad todos los días y pasa a ser una referencia en la ciudad. Este remate en altura se abre hacia la plaza cívica a través de terrazas absorbiendo los flujos que llegan desde el centro porteño por la Avenida 9 de Julio y observa a la vez la imagen sobresaliente de Eva Duarte referente política e histórica.
 Así completamos el plan de los edificios institucionales Casa Rosada, Palacio de justicia, Congreso Nacional, Fueros de la Justicia.  Los cuales cuentan con una plaza o un vacío próximo que les da esa espectacularidad que debe tener un edificio que representa el poder de una nación.




Sunday, December 04, 2011

Carli-Manca-Paez



El proyecto tiene como objetivo generar la apertura de diagonal sur ( av. Julio A. Roca) e insertar 3 fueros judiciales. Está emplazado en el microcentro de la ciudad autónoma de Buenos Aires, entre las calles Tacuarí, Venezuela, México y av. 9 de Julio. Nace entretejiéndose en la compleja urdimbre de la ciudad y a su vez utilizando la velocidad de la diagonal como vacío generador , el vacío deja de ser  la nada, para pasar a ser la matriz del espacio , que expresa y pone en movimiento los objetos que contiene, y que revela, asume, ordena y determina todos los atributos del espacio. El vacío está relacionado con las peculiaridades del sitio y por eso no es una carencia sino una creación
Se busca generar un dialogo entre materia y espacio en el que este ultimo sea una materia muy rápida o bien la materia sea un espacio muy lento.
Se implanta tomando la diversidad de alturas, proporciones y dimensiones de las calles circundantes. Busca rescatar su tejido, utilizar sus líneas guías, y la intersección de ellas con el vacío como nexo conector .Hacia Nueve de Julio el frente gana altura adquiriendo las proporciones de la extensa avenida. Mientras que hacia la calle México el volumen comienza a tener menor dimensión y su frente adopta las distintas escalas  que contiene esta calle.






La intersección de materia con el gran vacío de la diagonal genera movimiento, los volúmenes se rotan y comienzan a interactuar con ella, por momentos la respetan y por otros se retraen y dejan entrar al vacío, utilizando este recurso para albergar las distintas funciones  y escalas que requieren los fueros.
Para materializarlo se utiliza hormigón, buscando la robustez y solidez que este material impone , materializando las patas estructurales que caracterizan al edificio, dándole jerarquía a una institución con estas dimensiones. A su vez se proponen extensos vidriados de curtain Wall  buscando la permeabilidad del vacío y  acero corten perforado como piel de algunos sectores del edificio. En este caso optamos por transparentar y proyectar parte de la las funciones que requieren más jerarquía conectando la vida interior del edificio hacia el exterior. De alguna forma mostrar las actividades y sus protagonistas haciendo participar a la sociedad, e integrarla tratándose de una institución civil. El edificio se hace un actor relevante en la promoción y difusión de lo que sucede en su interior .Se busca fomentar la interacción de estas instituciones civiles con los ciudadanos proveyendo  nuevos espacios públicos, contenidos y equipados.
Un edificio destinado a los fueros judiciales debe tener diversos grados de transparencia y opacidad .Hacer partícipe a la sociedad y a su vez mostrarle solidez.



Saturday, December 03, 2011

Macherette-Vespasiano






Beiró - Piñeiro - Tait

 
Construir en el centro de la Ciudad de Buenos Aires, capital de la República Argentina, implica no solo una respuesta coherente a su entorno, escala, circulaciones, accesos y menesteres de la arquitectura pública. Implica la interpretación de más de 400 años de historia, contemplar la sucesión de hechos para que el edificio sea una respuesta natural, y continua de lo que la sociedad argentina es y así mismo representa.
En el centro convergen un abanico de estilos, épocas, diseño, ideologías, formas, maneras y usos. Estos se pisan, se molestan, discuten y conviven dando forma a través de un caos irreverente a un nuevo tipo de ciudad; Buenos aires, el caos otra forma de orden. Pocos lugares en el mundo tienen representados con tan buenos exponentes edificios del modernismo y del eclepticismo tardío, del colonialismo y la contemporaneidad de puerto madero. Sin embargo Buenos Aires los ampara, los enfrentas, les permite discutir.


¿Cuál será entonces el genoma de esta ciudad? ¿Qué le permite tener tantas identidades y fusionarlas bajo un solo nombre?
Atomizar el edificio en partes tan pequeñas que pierdan su escala natural, comprender sus partes por la morfología, resignificarlas por sus usos y entonces reorganizar todo. Construcción y descontrucción, de lo particular a lo general.