Poniendose en orbita....

Los proyectos se encuentran en tensión, ya creemos haber dejado atrás las pautas generales que le dieron sentido al concepto que lo abrazo y le dio sentido. Empiezan a aflorar las dudas.

La geometría (acorde a la propuesta generadora) es fundamental para entender como se comienza a trasladar esa primera volumetría en una serie de andamiajes necesarios para potenciar y darle vida a esas esencias  que lo vieron nacer.

Comenzando por entender la situación de acceso, que como ya hemos repetido bastantes veces no es el mero vano en un paramento, sino el desarrollo de una serie de elementos que posibilitan el denso transcurrir del espacio publico al privado. Seguramente armado a partir de algunos gestos que le den sentido, ya sea desniveles generando un podio, algún semicubierto, una  escala adecuada, una estructuración formal que indique la penetración, elementos de estructura que potencien este sentido, hasta llegar por ultimo a un espacio condensador que articule los demás espacios mas privados de nuestro proyecto. Y como en una secuencia totalizadora se derramen en circulaciones verticales estructurantes hasta llegar a circulaciones que abran paso a diversos usos.

Tambien sobre cuales son las actividades y espacios claves del programa y en su capacidad para convertirlos arquitectónicamente. Y si la lectura de los usos es precisa, seguramente podrán descubrir los espacios protagónicos del tema en cuestión, esas actividades claves del programa, aquellas donde pulsa como algo vital el organismo arquitectónico, sin dejar que se pierda aquello primogenito que le dio sentido, el concepto fundacional.

 

 

Y esos usos primarios, fundacionales, se iran complementando con aquellos secundarios que estén al servicio de los primeros, pero que fundamentalmente estructuren la totalidad como un ser vivo.  Donde nos permita  imaginar el edificio a gestar, como algo mas que una máquina donde se resuelve el conflicto funcional especifico del tema. Porque de eso se trata, de seguir cargando de energía, de potenciar esos primeros recursos, siempre como parte de un mismo relato.

Y en este recorrido no podemos olvidar a la materialidad, la estructura y el lenguaje. La materialidad implica el uso de los materiales en un modo lógico de proponerlos, formarlos y conectarlos, ordenandolos en una condensación de la forma expresiva, con todo el poder de comunicación que esa disposición sugiere.

 

Esta materialidad, entonces, consiste en una particular relación entre los diferentes elementos, capaces de orientar según un sentido los actos de las operaciones que realizamos. Se trata entonces, de analizar no solamente lo que nos dicen por su existencia, sino por su conformación, por su carácter, en donde se revelan los contenidos y características expresivas de su constitución. Esta articulación en que se organiza la materialidad significante, nos permite formular un instrumento de lectura.

Y dentro de la materialidad, como protagonista esencial desciframos la estructura. Que como estructura arquitectónica, sin lugar a dudas debe tener el doble rol de soportar el edificio y todas sus cargas, medir y organizar el espacio. Y por supuesto ser el germen del lenguaje arquitectónico.

Cuando nuestros proyectos llegan a tener expresiones de su materialidad, de sus usos, de su esteticidad, de su relación con el contexto, y de la conformación del ambiente y espacialidad, es decir de lo que la expresión arquitectónica manifiesta, se genera entonces tensiones constructivas u organizativas, donde cada contenido influye sobre los demás. Siendo considerados como un conjunto de elementos convivientes, ya que ninguno es dado como único o aislado; así pues, el uso que se hace del contenido y de las relaciones de influencia o tensiones que se generan entre éstos, hace que se influyan mutuamente. De este modo podríamos entender lo que influyo en su generación, erigida sobre la base de conceptos, pero que en el alcance de su totalidad se extiende mucho mas alla de lo que cada uno de sus enunciados propone.

De todo esta puesta en valor se trata la Entrega del lunes 20 y para que se entiendan todos estos recursos, les pedimos que lo transmitan a partir de:

Plantas 1:500, todas. La planta baja incluyendo las manzanas alrededor de la plaza.

Plantas 1:200. La de acceso y otra que sea de vital importancia.

Cortes-Vista 1:200. Un minimo de tres.

Maqueta 1:500 y maqueta 1:200 en construcción

Diversos croquis de recorrido, dibujados o fotos de maqueta trabajados

Breve memoria de autor

 

Todo esto se entrega el lunes en el taller, y lo envían con las imágenes en jpg, texto en Word, a la casilla de correos del nivel a4pedemonte@gmail.com

 

 

 

Buena Entrega !!