(sigue)
“Misión principal del Arquitecto:
Planificar y organizar el medio físico, el marco donde va a vivir el hombre, hacer más favorables sus más diversas actividades tanto individuales como familiares y sociales, como también satisfacer sus necesidades físicas y espirituales. El construye y levanta las formas, las envolturas que tienen como función limitar los espacios vivibles, con la ayuda de los materiales lo más adecuados posibles y puestos en equilibrio, con ciencia y técnica, cumpliendo con las leyes de la estática. El Arquitecto debe tomar en cuenta de manera especial las condiciones intrínsecas de cada país, los factores reales, geográficos, climatológicos, sociales y económicos y debe situarse dentro de un determinado momento de la historia, de una cultura y de una sociedad específica; es indispensable sentirla, entenderla y saber interpretarla. El tiene una misión clara y definida, y puede ser si así lo desea el más fiel y elocuente intérprete de su época.
Estas inmensas responsabilidades sociales y misión renovadora implican entonces considerar al Arquitecto esencial y principalmente como un HUMANISTA, cuya acción y actitud giran en torno al hombre, de sus gestos, de sus actos y de sus movimientos, como ser integral y universal. El debe darse cuenta de sus obligaciones de orden social y sobretodo moral lo que implica para él tener un profundo conocimiento de las Ciencias tanto humanas como naturales, de biología y morfología humana, de sociología y economía, de geografía física y humana, de recursos naturales. Es evidente que él no puede dominar integralmente todas estas ciencias, pero debe extraer de ellas lo esencial, lo básico, las partes que están íntimamente ligadas con la Arquitectura y le permitan luego coordinar sus pensamientos y sentirlos, y aprovecharlas en el momento de creación.
(...)Debe tener una preparación y una educación dirigida hacia estos aspectos, una intuición estructural y constructiva, un espíritu dirigido hacia la estática, debe ser TÉCNICO, pero debe saber que la técnica es únicamente un medio y que el fin principal no debe ser ella, sino el hombre y únicamente el hombre. (…)
El Arquitecto al ser sensible a los acontecimientos arquitectónicos, posee un cierto sentido e intuición plástica, un conocimiento rico de los hechos visuales. Puede imprimir una fuerza expresiva a los espacios vivibles. Si logra utilizar con sensibilidad, amor y emoción el lenguaje de las formas, las relaciones espaciales, los efectos logrados con la luz, los colores y las texturas, e interpretar el modelado, puede ser también un ARTISTA y habrá logrado enteramente su difícil y complejo cometido.“
Friday, January 27, 2012
“FORMACION UNIVERSITARIA DEL ARQUITECTO “ (parte 3).
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4 comments:
Gracias Dimas .
faltaba mas:
el equpo esta siempre buscando temas para compartir...de enero a enero!
como nos tiene acostumbrado dimas que hace todo todo todo bien. muy educado por cierto
toooooodo todo, excepto las obras...
Q salen como el orto!
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